Sí, ya sé. La crisis, la recesión, los brotes verdes y bla, bla, bla. El caso es que la mayoría estamos tiesos y no podemos permitirnos consumir tan habitualmente como quisiéramos los vinos que recomendamos en este blog. Pues bien, hoy vamos a "tirar la casa por la ventana" con un vino de poco más de 2€.
Borsao Barrica 2014 está elaborado con garnacha y tempranillo bajo la DO Campo de Borja (Aragón) y es sin duda una de las estrellas de Mercadona. No esperemos mucha expresividad, ni mucho terroir, ni efifanías, para eso nos tenemos que ir a la gama superior que elabora esta bodega. Pero al grano, si lo valoramos en base a su ridículo precio es un vino sobrenatural. Hay graneles más caros. Un vino ideal para el día a día y por menos de lo que cuesta un gin tonic te puedes empujar 3 botellas.
Quede constancia de que no suelo recomendar comprar el vino en supermercados y sí en tiendas especializadas. Primero por el trato que se le da a las botellas. Segundo porque las grandes superficies injieren de mala manera en los precios del mercado. Y tercero porque en una vinoteca vamos a tener a un señor que sabe, que nos puede recomendar y así no tenemos que sudar frente al lineal sin haber hecho un cursillo antes. Sin embargo soy consciente de que la mayoría del vino en nuestro país se compra en supermercados, por lo que, tranquilos, que iré señalando algunas etiquetas interesantes.
Si no quieres dejarte los cuartos, Bodegas Borsao también elabora otro vino 100% garnacha (sin barrica), en exclusiva para Mercadona. Se llama "Garnacha Mítica" y cuesta menos de un euro y medio. No necesitarás tarjeta black, aunque por unos céntimos más me quedaría con el barrica.
Puestos a no complicarnos la vida hagamos como los Ramones, tres acordes y venga, 20 años haciendo lo mismo.
Claro que esa simpleza esconde mucho más, esconde energía, rabia y un-puto-no-se-qué que ha marcado una época, sembrado un genero y cautivado a varias generaciones. Me refiero a las que escuchan su música, no a las que visten sus camisetas pensando que Ramones es una marca de ropa. Camisetas que ya vemos incluso en los lineales de supermercados. ¡Si Joey Ramone levantara la cabeza!
Valle de Güimar es una de las cinco Denominaciones de Origen de la isla de Tenerife y más concretamente una de las dos de la cara sur. Su orientación hacia sotavento hacen de ésta una comarca prolífica en vinos blancos, con viñedos que se extienden prácticamente desde la costa hasta altitudes por encima de los 1000 m.
Aquí los superventas son los vinos afrutados. La etiqueta de "afrutado" en Canarias se ha extendido para definir a los vinos semisecos o semidulces. Habitualmente los encontramos con botella de vidrio azul, o con este color en su etiqueta. Cosas del marketing.
Pero no vamos a hablar de éstos, sino de Los Loros Blanco Fermentado en Barrica 2014. Está elaborado por una pequeña bodega familiar: El Borujo, de Juan Francisco Fariña Pérez. Una minúscula producción de apenas 1300 botellas de esta referencia, un coupage de dos variedades autóctonas como Gual y Marmajuelo.
El Gual de por si, sin haber pasado por madera, suele aportar al vino aromas tostados y a frutos secos. En este caso además está fermentado y criado en barrica, unos cuatro meses con sus propias lías, lo que resulta en un vino blanco con mucho cuerpo, bien estructurado y de una profundidad aromática sin igual. La armonía es perfecta con el marmajuelo, que lo refresca y le aporta una buena carga de fruta madura, destacando los melocotones. Su precio es de unos 15€ (Hablamos de Canarias, desconozco a cuánto puede llegar en península o EEUU).
Este vino tiene además una buena capacidad de guarda. Hace poco probé también las añadas 12 y 13 y están fantásticas, con mucha vida por delante. intuyo que este 2014 tendrá más longevidad, si cabe.
Armonía perfecta también la que ejecutan las voces de Alice in Chains. Cuando hablamos de Seatle en los 90, automáticamente pensamos en Nirvana, al igual que pensamos en afrutados cuando pensamos en el Valle de Güimar. Hay que escarbar solo un poquito más, no mucho, para encontrar joyas como este vinazo y este temazo. No hay excusas.
"No Excuses"se incluye en el EP "Jar of Flies" y aparece en varios recopilatorios de la banda.
Quienes me conocen saben que no soy un gran fan de Ribera del Duero, la Denominación de Origen española con más best sellers ahora mismo en el mercado. En realidad no tengo nada en contra de ésta, creo que cuentan con vinos muy buenos. Eso sí, hay que pagarlos.
Cuando digo que hay que pagarlos me refiero a que los buenos vinos, por lo general, tienen un precio más o menos elevado. Y no me refiero a Vega Sicilia, sino a precios más acordes al mundo de los vivos.
El problema es que el mercado, los lineales de los supermercados y los bares cualesquiera, están abarrotados de vinos mediocres, baratos sí, pero mediocres y malos en muchos casos. Es lo que pasa cuando nos acostumbramos a ir a cualquier antro y pedir un "riberita", sin importarnos un carajo lo que nos están dando.
Luego están algunos superventas. Bodegas que hicieron un buen vino hace 5 años y siguen vendiendo como churros, a pesar de que las últimas añadas sean bazofias poco dignas de mención.
En fin, mejor vamos a lo que nos incumbe, que son los buenos vinos. Es el caso de este Alonso del Yerro 2012. Se trata de un tempranillo (también llamada tinta fina en la región) con 12 meses de crianza en barrica. Un auténtico vinazo y eso que estamos hablando del vino básico de la bodega regentada por Javier Alonso y Maria del Yerro, un proyecto relativamente nuevo, apenas 15 añitos.
La clave, como en todo vino, está en los viñedos. Distintos tipos de suelos milimétricamente ensamblados en un vino rico en fruta bien integrada sobre un sutil fondo mineral. Su crianza no es nada agresiva, permitiendo que el tempranillo se exprese perfectamente. Su precio supera los 20€, pero como decía, es lo que tiene. Si prefieres un maderazo sin personalidad corre al supermercado a por un crianza de 3€. Allá tú y tus chip partys.
Una de las propuestas más interesantes de Ribera del Duero, sin duda y ya que estamos ante uno de los grandes de la zona, no se me ocurre mejor maridaje que Bohemian Rhapsody, de Queen. Una de las mejores canciones de la historia del rock y la música en general.¡Salud!
Como habrán comprobado los vinos blancos que he recomendado hasta el momento se salen un poco de la linea comercial que inunda los lineales de supermercados y las barras de baretos cualesquiera. Más alla de los verdejitos jóvenes de turno existe un sinfín de vinos blancos de mayor complejitad y capacidad de guarda. Vinos de verdad.
Pairal Xarel·lo 2009, de la bodega Can Ràfols del Caus, ya tiene unos añitos, pero sigue muy vivo e intuyo que aguantará muchos más. Está elaborado a partir de cepas viejas de Xarel·lo, variedad habitual en el Cava, junto a la Macabeo y Parellada. En este caso no se trata de un espumoso sino de un vino tranquilo, un blanco seco con un año aproximadamente de crianza en barrica de castaño.
Bien por la crianza, o bien por su lugar de origen (Penedés), lo cierto es que en nariz recuerda mucho a un cava. En boca sin embargo nos encontramos con un vino muy meloso, de gran volumen y textura muy suave que lo hace muy bebible.
Su precio ronda los 20€, nada caro para lo que ofrece y dado su potencial. Debería ser un must en la bodega de cualquier coleccionista.
Sin movernos de Catalunya vamos con una banda que, aunque tiene solo un década a sus espaldas, suena muy a viejuno, Los Retrovisores son sesenteros declarados. Recuperan con gran acierto el sonido de los grupos garajeros de la época, con cierta chispa canalla prestada de la rumba catalana y una sección de vientos digna de los mejores combos jamaicanos. Hay momentos que incluso me recuerdan al gran Raphael.
Les dejo con el videoclip "Mentiras" del recientemente editado Sonido Joanic, y les recomiendo también la escucha de Carrer d'un Sentit, versión en catalán de un clasico sixtie, el One Way Street de Jigsaw. Estaúltima me despertó de un salto una noche que me había quedado frito escuchando la radio. Como a las 3 de la mañana, su potente sonido, fresco a la vez que añejo, me desveló sin remedio.
Existen pocos placeres comparables al de poner un vinilo de Skatalites y descorchar un reserva o gran reserva. Hedonismo en estado puro.
Entre los consumidores de vino menos puestos en la materia existe la creencia generalizada, de que un reserva o gran reserva es necesariamente un mejor vino. La clasificación generalizada en las Denominaciones de Origen de España establece los vinos como joven, crianza, reserva o gran reserva (hablamos de tintos, aunque también podremos encontrar blancos con crianza). Esta categorización no describe otra cosa que el tiempo de crianza del vino, en barrica y/o botella, antes de salir al mercado. Además a mayor tiempo de crianza mayor será su longevidad, es decir, los grandes reservas están hechos para guardar durante muchos años y los jóvenes menos.
Dicho esto, como ya he mencionado con anterioridad, esto no es sinónimo de calidad. Existen vinos jóvenes muy buenos y grandes reservas muy malos. Simplemente se diferencia entre tipos de vinos, no es una categorización cualitativa.
Llegado aquí hay que decir que, obviamente, las largas crianzas encarecen el precio del vino, por el coste que conlleva el empleo de una barrica durante años, espacio de almacenamiento, etc. No obstante en el mercado comprobaremos que hay grandes reservas a precio de granel y vinos jóvenes a precios desorbitados. Son muchos los factores que influyen y los mercados, pues eso, son los mercados...
La recomendación de hoy es un reserva de los baratitos, unos 4€ en bodega, pero de una relación calidad-precio particularmente buena. Hoya de Cadenas Reserva Tempranillo 2011 es un vino asequible y una alternativa perfecta a los tempranillos de Rioja Y Ribera del Duero. Está elaborado por Vicente Gandía, bajo la DO Utiel Requena.
Dado su precio recomiendo comprarlo por cajas y guardar algunas botellas, ya que todavía tiene recorrido, aunque este 2011 ya está óptimo para su consumo. Siempre recomiendo evitar los reservas recién embotellados. Son vinos hechos para perdurar y necesitan un tiempo para llegar a su mejor expresión.
Otra falsa creencia generalizada es la del género musical que hoy nos atañe. He escuchado infinidad de veces decir que el ska es genero derivado del reggae. Lo cierto es que es al revés. El ska surgió en Jamaica en los años 50, como adaptación del Rythm and Blues norteamericano a los ritmos caribeños. El Reggae vino después.
El tema de hoy, "Convention", es uno de mis favoritos, de los creadores del género: Skatalites. Este tema lo podemos encontrar en otros discos titulado como "Confucious", pero es el mismo.Ten en cuenta que a día de hoy, los Skatalites, después de 70 años siguen tocando y reeditando sus canciones (obviamente ya quedan pocos de los miembros originales).
Como iba diciendo, mejor en vinilo y acompañado de un buen reserva.
Attis es una interesantísima bodega de Galicia, que embotella bajo la Denominación de Origen Rías Baixas. Entre su catálogo, ademas de los archiconocidos albariños encontramos una amplia gama de monovarietales tintos.
Entre ellos está este pedral de 2013, toda un rareza. Pedral es una variedad de uva minoritaria en Galicia, que podemos encontrar en pequeña proporción en algunos tintos, pero que en esta ocasión Attis lo nos ofrece en forma de monovarietal. Posiblemente sea el único Pedral 100% del mercado.
El vino es ligerito y muy fresco, a la par que elegante. Me sorprendió bastante, ya que estas variedades poco frecuentadas suelen dar vinos generalmente más agrestes. No es el caso. Es pura elegancia, un vino en la linea de Barolo o Borgoña, pero sin ocultar su identidad atlántica, mineral y salino a más no poder. Su precio supera los 25€, pero dada su escasa producción y originalidad los merece.
Puestos a hablar de rarezas, un grupazo imposible de encasillar es Primus. La wikipedia habla de funk-metal. Puede parecerlo a simple oída, pero su estilo es algo más indescriptible a medida que profundizamos en su discografía. Melodías muy bizarras y letras de lo más surrealista, no intentes entenderlas, simplemente déjate llevar. El crítico Robert Christgau dijo de Primus que es "seguramente una de las diez bandas más extrañas de todos los tiempos, bien por ellos".
Al frente de la banda está Les Claypool, cantante y bajista, posiblemente uno de los mejores del mundo del rock, en sus diferentes vertientes.
La canción Tommy The Cat está incluida en su cuarto trabajo "Sailing the seas of cheese", de 1991.
El grupo Green Day alcanzó la fama con su álbum Dookie en 1994. Junto a Offspring protagonizaron una explosión en el punk californiano que arrastró a la fama también a bandas más veteranas como Bad Religion o NOFX.
Sin embargo Green Day siempre ha caminado en una linea algo diferente a los grupos más duros de punk/hardcore, dando al estilo un toque más pop, con clara influencia de Ramones, Beach Boys o incluso The Beatles.
Mucha gente pensaba que Dookie era el primer álbum de Green Day, pero cuentan con dos trabajos anteriores, con un sonido, eso sí, mucho más garajero.
Welcome to Paradise, la que posiblemente sea la mejor canción de toda su discografía fue publicada inicialmente en su segundo álbum Kerplunk, pero se reeditó posteriormente también en Dookie a petición de Reprise, compañía con la que acababan de firmar. Algo le verían.
Puesto que estamos escuchando al "Día Verde" vamos a recomendar un vino que vaya por ahí. No se trata de un "vinho verde" (los conozco muy poco). William Fèvre 2014 es un Chardonnay de Chablis, subregión de Borgoña. Un vino blanco, vamos.
La botella va impregnada de verde por todos lados (cristal, etiqueta, cápsula... ) y no es casualidad. Se trata de un Chablis más fresco y frutal de lo habitual, sólo un 10% del vino pasa por roble. El verde no viene a expresar otra cosa que el intenso aroma a manzana que desprende y esa frescura que parece transportarnos a una verde pradera, como protagonistas de Sonrisas y Lágrimas .
Y lo mejor es su precio, unos 20 euritos. Nada, comparado con lo que hay por la zona.
Infiltrado, de la Hacienda del Carche, es uno de esos vinos que probé de casualidad hace no mucho y me sorprendió gratamente. Aunque Jumilla carga con una injusta no muy buena reputación entre algunos aficionados al vino, lo cierto es que si buscamos entre la paja encontraremos más de un alfiler. Alfileres de plata y de oro, como en este caso.
Realmente la que me cautivó fue la añada 2014, pero recomendaré el 15 ya que al tratarse de un vino joven, ya va siendo complicado encontrar añadas anteriores. Tengamos en cuenta que ya está en el mercado la añada 2016. Pero vamos, que si encuentras alguna botella perdida por ahí no lo dudes.
Lo primero que llama la atención, y es que bebemos por los ojos, es su botella. Hace las funciones de decantador, ya que al tratarse de un vino sin filtrado puede contener posos. Aunque honestamente, he de decir que he servido que bastantes de éstas y no he encontrado precipitaciones. Tal vez con el tiempo. Es un vino fresco, ligero, goloso, muy aromático y con buen grosor en boca, cosa que a veces se echa de menos en este tipo de vinos. Fácil de beber, apto para todos los públicos.
Está elaborado con Monastrell, Garnacha y Syrah, configuración que a los amantes de los vinos afrancesados les sonará. ¿Côtes du Rhone? No, es Jumilla, pero si te gustan los vinos del Ródano búscalo, es una buena alternativa, hecha en España y a precio más que asequible, unos 9€.
Ya que estamos en esta dicotomía ente lo francés y lo español vamos con un tipo que conjuga muy bien estos dos pasaportes. Manu Chao es un francés hijo de exiliados españoles que se hizo famoso con la banda Mano Negra, aunque quizás los más jóvenes lo hayan conocido a posteriori en solitario.
Mano Negra no es sólo un concepto hispanofrancés. Mano negra es internacionalismo en estado puro. Es la Europa más bohemia, es Mediterraneo, pero también es latinoamérica, la Europa Gitana o África. Al fin y al cabo eso es lo bonito del vino (y la música). Poder saborear en un acorde, o escuchar en un sorbo los sonidos, colores y matices del mundo.
Señor Matanza es un temazo incluido último álbum de Mano Negra, grabado ya con la banda prácticamente desintegrada, pero es posiblemente su mejor disco y un preludio de lo que luego sería la música de Manu Chao en solitario o posteriormente con Radio Bemba. Un buen ejemplo de esa multiculturalidad de la que hablábamos. ¡Salud!
Abundan en internet los blogs de tematicas diversas en los que de cuando en cuando publican algún artículo sobre vinos escrito con esa parte del cuerpo que queda bajo la espalda. No solo blogs de pacotilla, también los medios de comunicación "importantes" nos deleitan a cada rato con supuestos consejos sobre vinos que, a los que respetamos un poco esta bebida, nos producen urticaria, o cuanto menos risa.
Uno de los consejitos que más se prodigan es el de que los vinos blancos se deben beber en el año. Ya hemos visto en capítulos anteriores que no es así, hemos visto blancos de guarda como el que que presentamos hoy.
Se trata de un vino de la isla de La Palma. Llanos Negros "Los Tabaqueros" 2006, está elaborado con Listán Blanco, Sabro, Malvasía y Vijariego, criado durante 9 meses con sus lías y embotellado sin filtrar ni clarificar en, atención, 2015.
Estamos ante un blanco muy muy complejo en nariz, uno de esos vinos para disfrutar con calma, y dejar el oxigeno vaya haciendo su trabajo y sacando a relucir todo su trasfondo. Añada 2006 que podremos disfrutar sin complejos durante bastantes años, tiene aguante para rato.
Llanos Negros es el proyecto personal de Carlos Lozano, enólogo de Bodegas Teneguía.
En lo musical otro proyecto paralelo de algunos músicos de bandas míticas del punk californiano como NOFX, No Use For a Name o Lagwagon es esta superbanda llamada Me First And The Gimme Gimmes, que se dedica a versionar temazos de los 60, 70 y 80 a diestro y siniestro, eso sí, en clave de punk.
Venga, un poco de caña que el vino no siempre hay que beberlo con música clásica, bata y monóculo. Me First And The Gimme Gimmes versionando The Harder They Come del gran Jimmy Cliff (les recomiendo también, por supuesto, escuchar la original).
Muchos neófitos al oeste de la costa levantina desconocerán que en Mallorca se elabora vino. Pero sí, lo hay y del bueno. Uno de los mejores ejemplos es este 4 kilos, desconocido para las masas pero una auténtica rock star entre los apasionados de este brevaje.
4 Kilos además del vino es el nombre de la bodega, recordando la inversión inicial (4 millones de pesetas) de sus socios Francesc Grimalt y Sergio Caballero. Es un vino fresco, ligero, fácil de beber, quizás demasiado fácil, por lo que recomiendo comprar más de una botella. Pero esa presunta simplicidad no es más que un espejismo, el vino tiene una profundidad de matices tremenda.
Esta añada está elaborada con variedades autóctonas de la isla, Callet y un 10% de Mantonegro. Su crianza de más de un año se realiza en barricas grandes (de 600 l.), con lo que se potencia su estructura sin convertirlo en un zumo de taninos. Es, como diría la prensa, "un caldo de marcado carácter mediterráneo". Pero nada más lejos. Mediterráneo sí, pero de caldo nada. Es fresco, vibrante, puro rock and roll.
¡Ojo!, que cada añada cambia de etiqueta. Por cierto, aún no lo he catado,pero me han soplado que el 2014 viene pisando fuerte. Abstenerse retrógrados.
Aquí el maridaje obvio sería con el video musical que viene incrustado a modo de QR en la contraetiqueta, pero no. Vamos con uno que también iba para rock star pero se quedó en actor de comedia. Jack Black y su proyecto musical, Tenacious D.
Tribute, como cuentan en la letra, "no es la mejor canción del mundo, es solo un tributo, porque jamás sonará como sonó aquel día".
Pues sí, el Txakolí también es vino. Hay quien pone cara de estar chupando un limón cuando le nombran el txakolí, bien porque son vinos de elevada acidez o bien por la fama de "vinos de segunda" que tenían hasta hace no mucho, especialmente por culpa (o mérito) de las elaboraciones más caseras.
Pero hoy en día hay txakolís que están a la altura de los mejores blancos de Europa. Un ejemplo es este Itsasmendi 7. Elaborado en un 80% con Hondarribi Zuri y un 20% de Riesling. Un vino blanco muy expresivo, con buena acidez, capaz de maridar bien incluso con un ceviche y con una untuosidad poco habitual en este tipo de vinos.
Si te gustan los Rieslings, Albariños o Malvasías Volcánicas, no es mala idea que anotes éste para tus próximas adquisiciones. No defrauda.
El vino vasco por excelencia no podíamos maridarlo más que con un temazo de un señor que ha llevado la música en euskera por todo el mundo . Fermín Muguruza comenzó en esto de la música formando el grupo Kortatu, abanderados del llamado Rock Radical Vasco, allá por los 80.
Kortatu hacían punk con algún destello de ska, un blend de estilos muy en la linea de The Clash. Tras la disolución de Kortatu formó Negu Gorriak, otra banda histórica del panorama vasco de los 90.
Posteriormente su carrera en solitario ha estado llena de colaboraciones con músicos de todo el mundo y varios álbumes en los que toca los más diversos palos.
Pero el ska y la música jamaicana siempre han estado ahí y es en el álbum Euskal Herria Jamaika Clash donde este hecho logra su máxima expresión. Ska y Reggae cantados en euskera, con un sonido puramente jamaicano y es que el disco grabó en Jamaica. Cuenta con colaboraciones tan notorias como Luciano, Toots Hibbert, Marcia Griffiths o Rita Marley.
Y de ahí sacamos este Plastic Turkey, un temazo para un vinazo. Como diría Mariano: ¡Gora Ardoa!
